Las dos sustancias se usan durante la fabricación para el fortalecimiento del papel plástico para envolver, jabón, productos cosméticos y envases de alimentos procesados. Se usan como reemplazo de otra sustancia, el di(2-etilhexil) ftalato (DEHP), que anteriormente se había visto que tenía unos efectos nocivos similares en la salud humana, dijeron los investigadores.