Aumentan consultas pediátricas de emergencia por ingestión de pilas. intramed.net.(Por Genevra Pittman- Reuters Health). 16/05/12. "Si un niño traga una pila botón, es posible que los padres no vean cuando eso ocurre y que el niño no tenga síntomas inicialmente. Pero el reloj avanza". La cantidad de niños atendidos en salas de emergencia de Estados Unidos después de tragarse una pila, o colocársela en la nariz o el oído, se habría duplicado en los últimos 20 años.
La mayoría de esas consultas de emergencia son por las pilas "botón", que tienen la forma de una moneda y son comunes en los juguetes, los controles remotos y los audífonos. Son una brillante tentación para los bebés curiosos. Los médicos advierten que cuando los niños las tragan, se pueden alojar en el esófago y generar corriente eléctrica por el tejido sin que los niños tengan signos de una lesión inmediata. "Si un niño traga una pila botón, es posible que los padres no vean cuando eso ocurre y que el niño no tenga síntomas inicialmente. Pero el reloj avanza", dijo el doctor Gary Smith, director del Centro para Políticas e Investigación de Lesiones del Hospital Nacional de Niños de Columbus, en Ohio, y coautor del estudio. "Atendimos niños que en menos de dos horas comenzaron a tener lesiones muy graves por la pila alojada en el esófago", dijo Smith a Reuters Health. Ahora, con una muestra representativa nacional de 100 hospitales de Estados Unidos con guardias de emergencia las 24 horas, el equipo de Smith estimó que entre 1990 y el 2009, más de 65.000 menores de 18 años habían sido atendidos en salas de emergencia por haberse tragado una pila. La frecuencia de esas consultas se duplicó durante el estudio (de cuatro, a entre siete y ocho de cada 100.000 niños de Estados Unidos por año). Eso sería porque cada vez más dispositivos electrónicos, audífonos y juguetes incluyen las pilas botón, en lugar de las cilíndricas AAA y AA. En la revista Pediatrics, el equipo escribe que más del 80 por ciento de las consultas de emergencia registradas fueron por problemas con las pilas botón; en la mayoría de los casos, un menor de 5 años se había tragado una pila. "Son brillantes y pequeñas, y los niños exploran los objetos con la boca como parte de su desarrollo. Cuando no saben de qué se trata un objeto, lo ponen en la boca", dijo el doctor Nicholas Slamon, pediatra del Hospital de Niños Nemours/Alfred I. duPont, en Wilmington, Delaware. Slamon comentó que con sus colegas atienden a varios niños por año que necesitan una cirugía de emergencia para extraerles una pila de la garganta, la nariz o la oreja. Pero sólo una pequeña cantidad de las consultas demandan una intervención tan seria. El nuevo estudio mostró que el 92 por ciento de los niños atendidos en salas de emergencia recibió tratamiento ambulatorio. Otro estudio, también de un equipo del Hospital Nacional de Niños, halló que, en 20 años, dos de cada 10.000 bebés y niños pequeños recibieron atención en salas de emergencia cada año por lesiones asociadas con el uso de la mamadera, el chupete y tazas antiderrame. La mayoría se había caído mientras caminaba o corría con esos elementos. Y ese resultado sigue siendo menor que la cantidad de niños pequeños que se lesionan en la cuna o con productos de limpieza en el hogar, según precisa el equipo de Sarah Keim. Los expertos coinciden en que los padres deberían asegurarse de que las pilas estén bien aseguradas en los dispositivos y, si es necesario, deshacerse de las pilas en un contenedor o colocarlas en el fondo del tacho de la basura, lejos del alcance de los niños, dijo Slamon. FUENTE: Pediatrics, online 14 de mayo del 2012 (Ver resumen en inglés) Nota de SerTox: sería interesante conocer que porcentaje de los niños que ingieren pilas botón hacen complicaciones por alojarse en el esófago en EEUU. En nuestra experiencia, sobre 300 consultas realizadas al SerTox por pilas, no hubo ningún caso, y el 98% evolucionó sin síntomas.