"El sarpullido provocado por la hiedra venenosa es la reacción alérgica más habitual en EE. UU., y los estudios han mostrado que unos niveles más altos de dióxido de carbono en la atmósfera están creando una proliferación de hiedra venenosa en todo Estados Unidos, incluso en los lugares donde antes no crecía", dijo Sven-Eric Jordt, autor principal del estudio y profesor asociado de anestesiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Duke en Durham, Carolina del Norte.