Metales: permanecen en el organismo 30 años y lo destruyen en silencio. larazon.es. 29/01/10 En muchos casos, pasan inadvertidos en las analíticas rutinarias. Pese a que su paso por el organismo, en la mayoría de los casos quizás no dejen rastro, si lo hacen, llegan a provocar desórdenes neurológicos, endocrinos, cardiovasculares o renales. Por todas partes, dentro y fuera del ser humano, forman parte del Planeta. En el aire que se respira, en la comida, en determinados productos, sobre todo si datan de años atrás, «de la época de la abuela» o si proceden de países como China e India, donde los controles son menos estrictos.
‘Bolitas’ de mercurio metálico
(Sertox)
Los metales pesados constituyen una amenaza para la salud por su toxicidad y por las consecuencias de su almacenamiento en el organismo humano. La «huella metálica» puede llegar a implicar enfermedades como anemia, desórdenes en el sistema nervioso y problemas de conducta, entre otros.
Cualquiera puede haberse encontrado expuesto a pequeñas cantidades de estos elementos: mercurio, plomo, cromo y cadmio, entre los más destacados, y «sin embargo no enterarse nunca de ello», apunta Santiago Nogué, jefe del Servicio de Toxicología del Hospital ClÍnic de Barcelona. Pero, ¿cómo? [ Ver ]
Aclaración de Sertox: Lamentamos informarles que la página del vínculo de este artículo ha sido borrada del servidor o no existe más.