Los eurodiputados han apoyado con 427 votos a favor, 172 en contra y 67 abstenciones la propuesta legislativa que la Comisión Europea elaboró tras la polémica extensión del permiso para la comercialización del herbicida de Monsanto y a raíz de la iniciativa ciudadana que consiguió más de un millón de firmas de ciudadanos europeos.
La actualización de las normas tiene el objetivo de incrementar la transparencia del proceso y garantizar que los informes que utilice la EFSA para autorizar un producto son "fiables, objetivos e independientes". Las nuevas reglas también prevén un proceso previo en el que el solicitante podrá pedir asistencia a la EFS sobre cómo aportar toda la información requerida con la intención de acelerar el proceso de autorización.