La pintura de las paredes puede contener plomo, incluso en las viejas capas que se desgastan con el paso del tiempo y el contacto.Un riesgo que se conoce desde hace casi un siglo."Desde la década de 1920 en la Liga de las Naciones se prohibió el plomo en las pinturas en los países desarrollados; sin embargo, en naciones en vías de desarrollo este no es el caso", explica a BBC Mundo Juan Caicedo, de la Alianza Global para Eliminar el Plomo en las Pinturas (AGEPP).De acuerdo con a OMS, el 99% de los niños que han sido diagnosticados con alto contenido de plomo en la sangre viven en países en vías de desarrollo como los de América Latina.
Los niños pueden arrancar fragmentos de pintura viejos que se llevan a la boca, advierte la OMS.
Aunque existen aparatos electrónicos que miden el plomo en las paredes, también hay pruebas simples de acceso cotidiano en ferreterías.
Las partículas de plomo que hay en el ambiente entran al cuerpo y se alojan en órganos. A la larga generan los problemas de salud, principalmente cognitivos.
Estructuras como los puentes pueden contener plomo en su pintura que se libera conforme se desgasta la superficie.
Mobiliario urbano en ocasiones es recubierto con pintura que puede contener plomo, según la OMS.
En 2007 la marca Fisher-Price tuvo que retirar 83 productos del mercado que fueron fabricados en China y que tenían alto contenido de plomo.