"El número se puede incrementar en los próximos días, según los padres vayan llevando a sus hijos al médico", dijo el ministro de Salud, Chen Zhu.
En efecto la cifra oficial de afectados más reciente es cinco veces mayor que la anunciada apenas unas horas antes.
La televisión estatal china informó el martes que el químico industrial identificado en la leche contaminada es melamina, un producto cristalino capaz de dar más consistencia a los líquidos y normalmente usado para fabricar plásticos.
La melamina puede hacer que los alimentos aparenten tener niveles proteínicos más altos.
Según el canal informativo, el químico se halló en 22 marcas nacionales de leche, y no en una sola como se había dado a entender originalmente.
A medida que crece el escándalo, el organismo chino de control de alimentos (AQSIC por sus siglas en inglés) reconoció que dos de las compañías vendedoras de la leche contaminada, Yashili y Suncare, habían exportado sus productos a Bangladesh, Yemen, Gabon, Burundi y Birmania.
El gobierno calificó el envenenamiento como incidente de seguridad alimentaria de Nivel 1 y formó un equipo de emergencia para lidiar con la enfermedad, informó la agencia de noticias Xinhua.
Según informa la corresponsal de la BBC en China, Jill McGivering, la crisis está empeorando a pesar de los intentos del gobierno chino de aparentar que todo está bajo control.
Serie de errores
Al principio las autoridades dieron la impresión de que era una sola marca de leche la que estaba contaminada. Ahora, prácticamente todas las marcas más importantes de esa industria están involucradas.
Según McGivering, China todavía no ha aprendido la lección sobre cómo lidiar eficazmente con crisis sanitarias.
A pesar de que en esta ocasión los indicios estaban claros (la primera muerte sospechosa ocurrió en mayo), las autoridades no actuaron con suficiente transparencia.
Algunos críticos creen que la proximidad de la celebración de los Juegos Olímpicos pudo haber inhibido al gobierno chino de hacer pública la información, informa McGivering.
Aún así, dice, es difícil saber si éste fue un intento deliberado de las autoridades para esconder el escándalo.
Y en cualquier caso, puntualiza McGivering, el país no tiene en marcha un sistema de alarma efectivo para detectar problemas de salud en las fases más tempranas.
Además, con una carencia de activismo social y de medios de comunicación libres en China, hay muy pocas medidas de control y equilibrio, asegura McGivering, quien prevé que este caso dañará aún más la reputación de China en el extranjero, despertando nuevos interrogantes sobre sus estándares de transparencia y seguridad.
Reacciones Cientos de padres furiosos hicieron cola afuera del edificio de la compañía a la que se acusaba originalmente de fabricar la fórmula contaminada, Sanlu Group, en Shijiazhuang, provincia de Hebei, para pedir explicaciones y compensación, según informó Reuters.
"Aunque pudieran devolvernos el dinero, no pueden devolvernos la salud de nuestros hijos. Estoy enojado. Estoy furioso", declaró un padre cuyas hijas consumieron productos Sanlu desde que nacieron.
El lunes, la empresa Sanlu se disculpó diciendo que los proveedores que le vendieron la leche le habían agregado, aparentemente, el producto químico.
Zhang Zhenling, el vicepresidente de Sanlu, no explicó por qué la compañía tardó tanto en informar al público acerca de la contaminación, a pesar de haber recibido quejas desde marzo y de haber confirmado en pruebas de laboratorio la presencia del químico a principios de agosto.
La noticia sobre el problema salió a la luz sólo después de que una empresa de Nueva Zelanda, Fonterra, poseedora del 43% de Sanlu, informara del hecho a la primera ministra de ese país, Helen Clark, quien luego se lo comunicó al gobierno chino.
Hasta ahora, se han arrestado a cuatro personas en conexión con el escándalo, aunque se esperan más detenciones. Otras 22 personas están siendo interrogadas. Aclaración de Sertox: La melamina es una base orgánica con la fórmula química C3H6N6, con el nombre IUPAC 1,3,5-triazina-2 ,4,6-triamine. No debe confundirse con la melanina, un pigmento que se encuentran en la piel y cabello.Toxicidad: Irritante. Posible reacción alérgica a los materiales en caso de inhalación, ingestión o por contacto con la piel. La ingestión de grandes cantidades puede causar dolor abdominal. Puede producir irritación de las vías respiratorias, ojos, piel y/o aparato gastrointestinal. Hipersensibilización y posible daño renal. La ingestión de melamina puede dar lugar a daño al sistema reproductor, o la vejiga o cálculos renales, que pueden conducir a cáncer de la vejiga. Véase Wikipedia (en inglés).