En un trabajo publicado en RETEL Nº 2 hablamos del tratamiento de la
intoxicación con cocaína. Le
transcribimos la parte de su interés: "La frecuencia de IAC con sintomatología
neurológica y cardiovascular, hace que el manejo de estos pacientes sea
complejo. Basándonos en esta premisa y de acuerdo al modelo de toxicidad de
Goldfrank-Hoffman, que muestra la interacción entre el efecto a nivel del
sistema nervioso periférico y central, el tratamiento de la toxicidad en el
SNC reduce las manifestaciones centrales y periféricas de la toxicidad de la
cocaína 14 . El tratamiento debe realizarse en lugares que permitan un
adecuado mantenimiento de la ventilación y control cardiovascular, como las
unidades de terapia intensiva o Unidades Coronarias. La utilización de
hipnótico-sedantes (de elección benzodiacepinas como el diacepán) tiene un
efecto beneficioso en el tratamiento de las sobredosis por cocaína y en la
prevención de la letalidad. Hay que tener en cuenta que frecuentemente se trata
de ingestiones múltiples de drogas lo que determina mayor complejidad en el
tratamiento 3 . Por ejemplo, cuando ingresan los pacientes excitados el uso de
benzodiacepinas puede potenciar los efectos del alcohol u otros depresores y
determinar cuadros de depresión neurológica importantes, incluso con depresión
respiratoria 3 . A pesar de lo difícil que resulta esta situación en una sala de
guardia (paciente agresivo, irritable, excitado y frecuentemente HIV positivo)
nosotros adoptamos conductas cuidadosas en cuanto a la sedación farmacológica,
especialmente si no se dispone de UTI 3 . Debido a que las vías de ingreso de la
cocaína (inhalatoria, parenteral o más de 1 vía) son vías de absorción rápidas
no es de utilidad implementar medidas de recuperación del tóxico. El uso de
agentes neurolépticos debería ser evitado en el tratamiento de IAC ya que
pueden confundir el cuadro clínico, aumentar la disipación del calor, exacerbar
la crisis anticolinérgica, precipitar reacciones distónicas, descender el
umbral convulsivo y exacerbar la letalidad 15-18 . Para concluir
enfatizamos que la asociación de sintomatología cardiovascular y neurológica,
ambas potencialmente graves, hacen de la intoxicación aguda con cocaína una
emergencia toxicológica compleja. En el manejo de estos pacientes incluimos
siempre que sea posible la internación en salas de Terapia Intensiva o en
Unidades Coronarias para garantizar el monitoreo completo de los pacientes y
poder actuar frente a complicaciones médicas de importancia (convulsiones,
hipertermia severa, rabdomiólisis, etc.). Enfatizamos en la necesidad de ser
cuidados en la sedación farmacológica con benzodiacepinas en los cuadros de
ingestiones múltiples de drogas que incluyen cocaína". El cuadro clínico y el
tratamiento del éxtasis es similar pero no disponemos de experiencia. |