Pobres buitres. Por Miguel Ángel Ruiz Parra*. laverdad.es. 06/09/14. Hasta los buitres tienen ya su día mundial. Bienvenido sea si sirve de algo, y lo cierto es que las aves carroñeras no pasan por una buena racha, según se ha encargado de recordar la sociedad científica y conservacionista SEO/BirdLife con motivo del Día Internacional de Sensibilización sobre los Buitres (IVAD, por sus siglas en inglés), que se celebra precisamente hoy. Leer relacionado; España, la amenaza que representa para los buitres la aprobación del diclofenac veterinario

Ejemplar de buitre leonado.Venenos, electrocuciones, choques contra aerogeneradores, caza furtiva y disminución de sus fuentes de alimento son las causas de que estas grandes aves (no diré hermosas, por mucho que a mí me gusten) estén sufriendo grandes bajas en sus poblaciones. SEO/BirdLife advierte sobre la "gran responsabilidad" de España en la protección de los buitres puesto que nuestro país alberga el 90% de las carroñeras que habitan en el continente. Especies como el buitre negro (‘Aegypius monachus’), el buitre leonado (‘Gyps fulvus’), el alimoche común (‘Neophron percnopterus’) y el quebrantahuesos (‘Gypaetus barbatus’) son monumentos naturales que tenemos el deber de conservar.
Anotad este dato: entre 2005 y 2010 fueron hallados en España los cadáveres envenenados de 575 buitres leonados, 133 buitres negros, 69 alimoches y 13 quebrantahuesos, números que solo son "la punta del iceberg" puesto que lo normal es encontrar solo "del 7% al 10 %" de las aves que mueren intoxicadas, recuerda SEO/BirdLife, que insiste en la necesidad de que las comunidades autónomas apliquen protocolos eficaces para erradicar el uso ilegal de veneno. La Región de Murcia firmó este mismo año un convenio con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para acabar con esta lacra en el campo, en el marco del programa de reintroducción del quebrantahuesos, con el que colabora Murcia con la esperanza de que este formidable ser vivo vuelva a criar en nuestras sierras. Ya los vemos por aquí de vez en cuando, pero aún no se han decidido a recuperar sus nidos históricos en Sierra Espuña y el Noroeste. 
Una de las mayores amenazas que penden actualmente sobre los buitres en España es la aprobación en 2013, por parte del Ministerio de Sanidad, del diclofenaco, un fármaco antiinflamatorio de uso veterinario que se administra al ganado y que resulta mortal para las aves que lo ingieren, como ya han demostrado estudios científicos. Por este motivo, SEO/BirdLife reivindica la campaña impulsada por BirdLife International con el hashtag #banvetdiclofenac "para exigir la retirada de este medicamento y el uso de alternativas igual de eficaces para evitar así que se repitan desapariciones como la que acabó en una década con el 99% de buitres en el subcontinente indio", señala esta sociedad científica.
Las comunidades autónomas tienen en su mano una herramienta fundamental para garantizar la supervivencia de las aves carroñeras: desarrollar el Real Decreto 1632/2011 que aprobó el entonces Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y que pedía a las regiones que aplicasen su propia regulación para designar zonas protegidas en las que pudiesen alimentarse los buitres. La eliminación sistemática del ganado muerto en el campo español como consecuencia del brote de las ‘vacas locas’ dejó a estas aves sin alimento, una situación que provoca el ingreso de numerosos buitres desnutridos en centros de recuperación, o que algunas poblaciones (como los buitres negros del Valle de Lozoya, en Madrid) acudan a comer a los vertederos.
Pero esa alarma sanitaria se levantó hace tiempo y ya no hay excusa para no regular la ubicación de muladares. Se trata de un paso que, según ha criticado SEO, solo han dado hasta la fecha Andalucía, Aragón, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Navarra, La Rioja y la Comunidad Valenciana. Otras autonomías como Murcia, Baleares, Extremadura, País Vasco y Galicia ya están trabajando en sus propios borradores.
Sería una solución positiva para todos, en opinión de SEO/BirdLife, porque si se designan zonas para la alimentación de aves carroñeras, tanto las administraciones autonómicas como el sector ganadero "se verían beneficiados" al eliminarse los gastos de la recogida y el procesamiento de los cadáveres, que hasta ahora se pagan a medias.
Esta es la triste realidad que se esconde detrás de los buitres que aparecen débiles y desorientados de vez en cuando en entornos urbanos (el jueves en Jumilla, sin ir más lejos), y que tanto nos sorprenden cuando vemos sus fotos en el periódico: fuera de sitio, posados tristemente en un balcón o sobre una señal de tráfico, y quizá preguntándose (como nosotros) qué demonios hacen allí.

* Miguel Ángel Ruiz Parra. Informo sobre medio ambiente. También opino y creo que me mojo, pero prefiero aportar datos y documentos. Entre el campo y la redacción, siempre persiguiendo noticias. Soy jefe del área de Sociedad y Cultura de La Verdad.En Twitter: @maruizlv maruiz@laverdad.es