Teresa Forcades. (Reuters) Pese a que la ‘terapia de la lejía’ está prohibida por la Agencia Española de Medicamentos desde 2010 por su toxicidad (tanto la asociación como Pàmies han sido multados con 600.001 euros y 90.001 euros respectivamente), ellos no dudan en invocar la "libertad de expresión". La crónica del evento, narrada por ‘El Periódico’, fue un disparate.
Cartel de promoción del evento sobre el suplemento mineral milagroso (SMM).Teresa Forcades intenta dar validez al MMS citando un estudio de unos investigadores que usaban el dióxido de cloro en pacientes para tratar la esclerosis lateral amiotrófica. El estudio existió, pero Forcades miente cuando menciona las fechas y dice que no se saben aún los resultados: la conclusión de los investigadores fue que no tuvo ningún efecto en el retraso de la enfermedad (aquí el ‘paper’). Forcades escribió el otro día una carta donde mencionaba todos estos detalles y recalcaba que el MMS no es perjudicial (falso), aunque se curó en salud al afirmar que hay que demostrar que tenga efectos terapéuticos.