Hablando de setas: El peligro de las intoxicaciones.diariodenavarra. 01/11/08. La "regla de oro" para no intoxicarse es identificar correctamente la especia que se va a consumir.ANTES de consumir setas hay que tomar precauciones. Hay una frase que podría destacarse como la regla de oro para no intoxicarse: solo una correcta identificación botánica de la especie que se va a consumir asegura no intoxicarse.Dicho esto, hay una serie de falsos mitos en el mundo micológico que conviene desenterrar.
Primero: el ennegrecimiento de una moneda de plata introducida en el
guiso no quiere decir absolutamente nada sobre la toxicidad de la
especie en cuestión. También incluye el caso de añadir ajos. Segundo:
los maceramientos en aceite o vinagre, las salmueras y la desecación no
influyen en la mayoría de las especies tóxicas. Tercero: las setas que
han sido comidas parcialmente por los animales pueden ser tan tóxicas
como por las libres de huellas de mordisqueo. El tubo digestivo de
algunos animales no absorbe tóxicos potencialmente mortales para el
hombre. Cuarto: las especies que cambian de color al corte son tóxicas.
Falso.
Ojo con la falsa "illarraka"
En Navarra la mas frecuente intoxicación observada la provoca el Entoloma lividum, fácilmente confundible con la Clitocybe nebularis, conocida como pardilla o illarraka (en el idioma de los navarros). Es altamente tóxica y tampoco es desdeñable el alto número de personas que sufren intolerancia a la indigesta Illarraka. Hemos atendido intoxicados por Amanita phalloides – con buena evolución- que han venido al hospital tras ingerir esta especie "regalada" por un vecino o familiar.
Actualmente hay líneas de investigación médica, mayoritariamente asiáticas, dirigidas a especies determinadas de hongos con efectos prometedoramente positivos en el tratamiento del cáncer. Quizás una salida al bosque disfrutando de su belleza tenga unos efectos en la parte de salud intangible de las personas que no valoramos adecuadamente.