Piola JC*, Digón A, Prada DB, Evangelista M.
Introducción
El problema de las intoxicaciones en niños es importante
en toda América Latina. Recientemente se propuso reemplazar
el término Accidente Toxicológico por Intoxicaciones
No Intencionales Hogareñas (INIH), debido a que la
primera denominación dificultaba la comprensión
y prevención de estos eventos (1). La idea de este
cambio es reafirmar que estos eventos no son fortuitos lo
que debería ayudar a establecer nuevas estrategias
de intervención para su prevención. En el SERTOX,
el 97% de los llamados anteriormente accidentes corresponden
a las INIH.
Objetivos
Mejorar el conocimiento de riesgos y condiciones de exposición
para contribuir a establecer planes de prevención de
INIH en Rosario, Santa Fe, Argentina.
Material y Métodos
Se utilizaron datos de 2739 consultas de INIH atendidas
entre enero 2000 y junio 2003 en el Sertox, Rosario, Argentina
que fueron analizadas utilizando recursos no tradicionales
del ámbito de la Estadística, como el análisis
de datos simbólicos lo que permitió una descripción
visualmente rápida del objeto a estudiar (2). El basamento
teórico para considerar los factores de riesgo que
condicionan la ocurrencia de este tipo de intoxicaciones son
el método epidemiológico y el modelo de historia
natural (la exposición al riesgo, los desempeños,
las demandas). Responden a las preguntas qué, dónde,
cuándo, a quienes, en que circunstancias, etc., en
una aproximación a un por qué práctico
que permita identificar eslabones vulnerables en la cadena
de causalidad (3).
Resultados
En un gráfico, denominado zoom star se describió
el objeto simbólico INIH considerando todas las variables
y categorías simultáneamente. La poligonal unió
los puntos- categorías de mayor tamaño. Las
INIH se caracterizan por individuos de entre 0 y 9 años
de edad en un 81%, el sexo es masculino en un 59%, la cantidad
ingerida es escasa en un 81%, evolucionan sin síntomas
en un 70%, la latencia desde la intoxicación hasta
la atención es menor a una hora en el 80%, el tipo
de tóxico es un producto del hogar en un 23% y plaguicidas
de uso doméstico en un 20%, la presentación
es generalmente en líquido (54%). En cuanto a la hora
de ocurrencia, la más frecuente es de 20 a 22 (18%),
sin embargo existe un 26% de casos que se producen entre las
10 y las 14 horas.
Discusión
Para que el cambio de denominación propuesto para
los accidentes toxicológicos sea útil debe servir
para dar lugar a nuevas estrategias tendientes a su prevención.
En la tríada ecológica que caracteriza a la
enfermedad (agente, huésped, medio) se identifican
factores que incrementan el riesgo de exposición. Entre
aquellos ligados al huésped la edad marca diferencias
en la exposición al riesgo de distintas intoxicaciones,
en la capacidad para superarlas y en el grado de daño
sufrido. El 81% de las INIH ocurren en menores de 10 años.
La incidencia es más alta entre los 18 y 35 meses de
edad, en que los niños alcanzan las cosas y las llevan
a la boca El niño aprende progresivamente a superar
las demandas y reconocer el margen de seguridad, y lo hace
por un proceso de ensayo-error. Consideramos que el ligero
predominio de varones en nuestros registros (59%) no es un
factor importante a la hora de la prevención. Las características
asociadas con intoxicaciones en niños pequeños
difieren de las de los adolescentes o adultos porque generalmente
hay una sola sustancia involucrada; la sustancia generalmente
es poco tóxica; la cantidad ingerida usualmente es
escasa (81%) y los niños son traídos rápidamente
a la consulta (80% antes de una hora) (4). Entre los factores
relacionados con el ambiente, en especial el hogar, influyen
las condiciones de pobreza de una amplia franja de nuestra
población que contribuyen a crear viviendas inadecuadas
en áreas peri urbanas, deficientes o carentes de servicios
básicos. También llevan al núcleo familiar
a situaciones de distorsión -ausencia del padre, desempleo
o subempleo, hijos numerosos no planificados, hacinamiento,
marginalidad.- todo lo cual hace más difícil
para el niño superar esta etapa sin el apoyo necesario
del medio físico y humano que lo rodea (3). En estas
condiciones el niño crece entre riesgos (químicos,
físicos, biológicos, sociales) con los que se
familiariza, creándose una cultura de aceptación
de los mismos, con márgenes mínimos de seguridad.
Por otra parte, cuando la calle es peligrosa, aumenta la exposición
a riesgos dentro del hogar, ámbito inadecuado para
las necesidades de juego y exploración del niño
(3). Esta distorsión puede generar tensión dentro
del hogar, con lo que crece el riesgo de intoxicaciones. Se
han identificado otros factores asociados como estrés
en el grupo familiar (enfermedad, separaciones, etc.), inversión
de los roles tradicionales de sostén (madre jefe de
hogar), padres más jóvenes, el deseo de llamar
la atención por parte del niño. El medio puede
favorecer el acceso del niño al producto peligroso
por descuidos en su almacenamiento, envases inadecuados, existencia
de productos no registrados para uso domestico, etc. Las horas
de ocurrencia más frecuentes de INIH en nuestros registros
(de 20 a 22 y de 10 a 14 horas) tendrían relación
con los momentos en que se prepara la cena y almuerzo, disminuyendo
el cuidado y control sobre los niños. Respecto al agente:
las INIH tienen escasa mortalidad pero elevada incidencia.
En nuestros datos 61.3% del total de los intoxicados atendidos
en el SERTOX corresponden a INIH. Los únicos reportes
de eventos letales registrados en niños en nuestra
región fueron antes de la prohibición del Parathión
en Argentina (5). Los tres principales grupos de sustancias
sobre los que habría que trabajar en prevención
son los productos del hogar (23%), los plaguicidas de uso
doméstico (20%) y los medicamentos (16%). A modo de
síntesis, debido a su carácter sorpresivo y
a sus repercusiones, el antes llamado accidente toxicológico
y sus resultados se presenta como un incidente brusco e impensado,
aparentemente generado en el momento, casi sin historia. Sin
embargo cuando un niño pequeño ingiere kerosén
no puede considerarse como un hecho fortuito la concatenación
de eventos necesarios para que esta sustancia llegue a sus
labios, porque en nuestro país no existe legislación
que obligue a los vendedores a utilizar un envase característico,
pudo haber estado en un envase de gaseosa, que algún
familiar o allegado no guardó en un lugar apropiado.
Por lo tanto, para prevenir esta intoxicación es útil
conocer estos hechos y no suponer que es algo que sucedió
por casualidad o fortuitamente.
Conclusiones
El mejorar el conocimiento sobre las situaciones de riesgo
que condicionan la exposición es esencial para poder
establecer planes de prevención de INIH en nuestra
región. Consideramos que a nivel gubernamental las
estrategias de prevención deben orientarse hacia la
prohibición de tóxicos de elevado riesgo, la
obligación de emplear envases de seguridad y el control
del manejo clandestino de productos hogareños y plaguicidas.
Es necesario introducir el concepto de vulnerabilidad socio-económico-cultural,
para que los programas de prevención puedan instrumentar
estrategias de intervención flexibles, adecuadas a
las condiciones locales.
Bibliografía
1. Evangelista M, Prada DB, Sánchez JE, Garcia DI,
Moreno I, Piola JC. Adaptación a toxicología
de una nueva denominación del término accidente.
Enviado y aceptado para su publicación en Revista Médica
de Rosario. Vol. 70, Nº 1, 2004.
2. Moscoloni N, Isern G, Navone H, Evangelista M, Prada DB,
Piola JC.Caracterización de intoxicaciones no intencionales
hogareñas en Rosario a través del análisis
de datos simbólicos. Comunicación oral en las
I Jornadas de Epidemiología, Facultad de Ciencias Médicas,
UNR e I. Lazarte. Noviembre 2003.
3. Glizer IM: Prevención de accidentes y lesiones:
Conceptos, métodos y orientaciones para países
en desarrollo. Serie Paltex para Ejecutores de Programa de
Salud Nº29. OPS, 1993.
4. Fine JS. Pediatric Principles in Goldfrank’s Toxicologic
Emergencies.Pag. 1867. Sixth Edition. Appleton & Lange.
Stamford, Connecticut. 1998.
5. Piola JC, Prada DB. Influencia de medidas regulatorias
en la mortalidad por talio y parathión en Rosario,
Argentina. Acta Toxicol Argent 7(29:41-43, 1999.
Presentación (ppt)