Pehuajó, nunca olvides que… el arsénico mata.noticiaspehuajo. 19/01/11. El agua continúa siendo una problemática pendiente de ser incluida en las políticas de Estado, como flagelo de nuestro país – Se suma al arsénico, la presencia de vanadio y aluminio, dos metales sumamente tóxicos – El veneno corre por las venas, mientras tanto Pehuajó y la zona esperan soluciones. A través de la red social Facebook se comunicó que los integrantes del programa CQC iban a llegar a 9 de Julio para realizar el segmento del programa “Proteste ya” con la problemática del arsénico que vive la zona de Carlos Casares, Pehuajó y 9 de Julio. Allí se pudo ver que la ciudad de 9 de Julio posee sólo cuatro canillas de agua potable, sin arsénico, para toda la población nombrada. El titular de ABSA –con periodistas y cámaras de por medio- se comprometió a realizar a partir del mes de abril, los trabajos pertinentes para solucionar la problemática en la ciudad. Sigue….
Una flor en un vaso de agua limpia
(Sertox)
Carlos Casares es la segunda ciudad en cuestión, allí funciona la Planta de Abatimiento de Arsénico, festejada cuando se inauguró allá por el año 2006. Pero la realidad, es que dicha planta- la cual iba a traer solución a la ciudad de Pehuajó- no funciona correctamente y todo indica que faltaría concluir la obra para que el nivel de arsénico en agua logre valores aptos para el consumo humano.
La planta de Casares está compuesta por cinco celdas para el abatimiento y decantación del arsénico con un elemento que se llama bicloruro de aluminio. Con la quinta celda recientemente instalada, se están realizando las primeras pruebas para controlar la potabilidad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el consumo de esta sustancia por un lapso de entre 5 y 20 años genera una altísima probabilidad de contraer cáncer de vejiga, riñón, piel, cutáneos y pulmón, como así también diferentes enfermedades en los pies.
El límite aconsejable el de 0,01 miligramo de arsénico por litro, mientras que el Gobierno nacional modificó en 2007 el Código Alimentario, estableciendo que en todo el país y a partir del año 2012 deberá regir ese tope del 0,01. Actualmente, el límite es 0,05.
Bolívar es otra de las ciudades donde el flagelo del arsénico no da respiro. Tiempo atrás, el diputado provincial José Antonio Bucca oriundo de dicha ciudad, declaró que "si bien la totalidad del Partido de Bolívar y varios distritos de la Provincia requieren una solución integral, para lo cual hemos estado trabajando a través de un Proyecto de Ley que ya cuenta con media sanción en la Cámara de Diputados y por el cual se prevé la creación de un Fondo Provincial, acompañado con una serie de instrumentos fundamentales para abordar la problemática”.
Llegamos a Pehuajó, lugar donde todavía todo es una incógnita que sucederá con la problemática del arsénico, por el momento todos hablan de la temática, por momentos todo parece estar tranquilo. Mientras tanto, la misma historia de siempre…
Todos los pehuajenses pagan el agua potable de red y los que pueden, invierten en agua potable, gastando un promedio de $15 por bidón de agua, y el que no puede, está a la deriva sin darse cuenta. Por lo tanto, haciendo un cálculo estimativo -y totalmente arbitrario- una familia tipo constituida por dos adultos y dos menores, consumen un promedio de 5 litros por día (entre infusiones, preparados de jugos, etc) haciendo que un bidón de 20 litros rinda cuatro días. Cumplido el mes la familia habrá gastado un promedio de $120 por agua potable sumado a la factura de agua que llega sin falta a la casa y que exige –mediante fecha de vencimiento- sea pagada a término para evitar el corte del suministro…
ARSÉNICO EN ARGENTINA
La Argentina está entre los diez países del mundo más afectados por la contaminación del agua con altos niveles de arsénico según investigadores de la Universidad de La Plata. Es un metal carcinogénico y en muchas localidades bonaerenses su concentración en aguas supera los valores límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Una entrevista realizada por la Federación Bioquímicos de la Provincia de Buenos Aires a investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP dice que “recién en octubre de 2008 después de muchas reuniones que hubo en el Ministerio de Salud bonaerense por el tema del arsénico, los funcionarios reconocieron el problema real que existe en la provincia con el arsénico” agregando que “el problema siempre estuvo, nada más que no se lo quiso ver. Antes había más controversia porque los niveles estaban justo en los límites de la detección de los métodos. Ahora las tecnologías son mucho más sensibles e incluso detectan y cuantifican niveles 10 a 50 veces por debajo de ese límite.
Entonces no hay dudas, no se puede mentir más”.
En el continente los tres países con peores problemas de arsénico son México, Chile y Argentina. Las últimas informaciones consultadas en la WEB cuentan que en México están tratando desde hace varios años la problemática, invirtiendo en políticas y plantas abatidoras con filtros especiales para brindar mejor calidad de vida a sus ciudadanos.
Por su parte Chile, el país más afectado por este veneno, desde hace 40 años que viene trabajando y ha logrado dar solución completa a la problemática invirtiendo en políticas de gobierno nacional.
Argentina, Buenos Aires y Pehuajó todavía esperan que la salud sea una cuestión de Estado y que las sociedades se unan para lograr esto…
NOROESTE BONAERENSE: PEHUAJó
Un documental realizado por la periodista María Laura Santillán emitido por canal 13 tiempo atrás, menciona que la zona noroeste de la Provincia de Buenos Aires es la más afectada encabezando la ciudad de Pehuajó, como la población más complicada. Se habla que el problema del arsénico data de más de 40 años, pero en nuestra ciudad comenzó a manifestarse socialmente, en la última década.
El arsénico –según el Dr. Ricardo Galimberti, Presidente de la Sociedad Argentina de Dermatología- no genera síntomas, uno no vislumbra el veneno cuando consume el agua, se acumula en los tejidos del cuerpo y altera los ciclos celulares con la alta predisposición a generar cáncer. Una vez que el ciudadano toma el agua, incorpora el arsénico y no lo elimina.
Geológicamente, la zona de Pehuajó, y todo el noroeste y centro bonaerense, es la indicada para contener arsénico en las aguas. En el año 2006, se pone en marcha la Planta Abatidora de Arsénico en Carlos Casares con buen resultado, pero al poco tiempo la planta comenzó a tener problemas con sus filtros y dejó de funcionar, de manera drástica hasta en un 50%.
Galimberti asegura que una vez consumida el agua, los médicos no pueden hacer nada ya que primero se tiene que combatir el mal que causa las enfermedades que se manifiestan por el consumo de agua con arsénico.
El investigador de la CIC, y profesor del Centro de Investigaciones del Medio Ambiente (CIMA) de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP, Dr. Andrés Porta, aseguró que “el arsénico es carcinogénico.
Si uno consume arsénico con el agua contaminada durante mucho tiempo, se acumula y queda incorporado en el cuerpo a nivel hepático, renal, y en la piel donde se desencadenan sus efectos tóxicos. Y los carcinógenos no tienen una dosis umbral como los tóxicos”. Sumado a esto, los últimos estudios realizados en Chile, sugieren que el arsénico trae una consecuencia inesperada y que aumentaría el riesgo de tuberculosis a largo plazo.
¿QUÉ OCURRE CON EL ALUMINIO?
Los investigadores de la UNLP cuentan que “los municipios de la zona de 9 de Julio, Carlos Casares, Junín, zonas muy productivas, han incorporado plantas con la metodología de la ósmosis inversa. La desventaja que tiene es que es muy caro el mantenimiento. También han utilizado otros sistemas con polímeros de aluminio y logran que baje el arsénico”. Quizá esta es la razón por la cual, los valores de arsénico en agua en las ciudades de Carlos Casares y Pehuajó, arrojen cifras bajas. O sea, el arsénico es decantado por el aluminio, cuanto más aluminio contenga el agua menos será el valor de arsénico. Ahora bien, y los polímeros de aluminio ¿son tóxicos?
El problema del polímero de aluminio es que el aluminio también es tóxico si llega a absorberse, y prueba de ello es que es uno de los principales responsables de la desaparición de vida acuática en determinados ecosistemas acuáticos del planeta. Algunos científicos lo relacionan con la causa de Alzheimer en las personas.
El aluminio solubilizado es más absorbible. Si bien es una opción tecnológicamente interesante no logra la misma sensibilidad, como solución de apuro funciona pero dentro de 10 años vamos a ver qué hacemos con los barros de aluminio que se producen ya que hay que extraerlos y saber dónde desecharlos.
Hasta acá, sabemos que el arsénico es relacionado al cáncer y la tuberculosis y el aluminio se lo relaciona con el Alzheimer ¿Algo más?
Sí, no se puede evadir que mediante estudios realizados, el agua que suministra Aguas Bonaerenses (ABSA), también posee ‘vanadio’, un metal pesado también altamente tóxico que generalmente se encuentra donde hay arsénico.
Los especialistas afirman que los daños pueden manifestarse en los descendientes de los actuales pobladores, proclives a sufrir malformaciones genéticas o síndrome de Down.
PARA REFLEXIONAR
Tanta información se tiene respecto al arsénico en agua que el ciudadano no puede obviar saber sobre la problemática que padece toda la provincia bonaerense, en especial Pehuajó, Casares, 9 de Julio.
Se suma al arsénico, la presencia de aluminio en exceso para lograr bajar el nivel del primer elemento mencionado y el vanadio, otro metal tóxico encontrado en el agua distribuida por ABSA.
En el año 2009, el Centro INTI-Química desarrolló un modelo de intervención para el abatimiento de arsénico y un dispositivo domiciliario para el tratamiento de agua en áreas rurales aisladas, que no necesita energía eléctrica para su funcionamiento.
Asimismo, el Centro de Estudios Ambientales (CEA) de la localidad de Lobos respecto a la calidad del agua de distribución pública, encomendó al Centro INTI-Química, el análisis de muestras de agua provenientes de alrededor de 20 pozos. Los resultados arrojaron un exceso de la concentración de arsénico dado en diferentes niveles; por lo tanto, realizó un informe preliminar técnico y económico denominado “Proyecto de planta de abatimiento de As para la provisión de agua potable en la Ciudad de Lobos, Bs. As.”, el cual propone diferentes alternativas tecnológicas a aplicar para luego brindar asistencia en su implementación.
Para la zona rural, donde no llega la distribución de agua por red, se diseñó un dispositivo para la remoción de arsénico que emplea la tecnología de coagulación-filtración. Se trata de un sistema económico y sencillo de operar que no necesita energía eléctrica para su funcionamiento.
Para las poblaciones con sistema de distribución de agua por red existen varias tecnologías desarrolladas y aprobadas para plantas de abatimiento de arsénico, los costos de mantenimiento para dichas plantas son elevados.
Se han realizado muchos proyectos para sacar el arsénico del agua, se han puesto en marcha plantas abatidoras, han realizado estudios para solucionar la problemática Nueve de Julio-Casares-Pehuajó- que no han sido tomados por las respectivas autoridades, existen casos confirmados de HACRE en las tres ciudades, casos en la provincia y el país.
¿Cuánto más se debe esperar? Todo se puede resumir simplemente en decidir hacer de la salud de los bonaerenses “una cuestión de ESTADO”.