Escribo desde Guatemala. Soy archivista y estoy preocupada por las fumigaciones que se realizan en mi institución, cada año. Especialmente por lo que he leído sobre la toxicidad del bromuro de metilo y el fosfuro de aluminio. La aplicación la hace una empresa de fumigación, pero lo que me preocupa son los residuos que estos plaguicidas puedan dejar sobre la documentación y que al manipularla, tanto nuestro personal como nuestros usuarios, puedan ocasionarles daños. He buscado información al respecto en Internet, pero no le localizado nada. Podrían ayudarme al respecto? | |||
En Argentina el Bromuro de metilo está prohibido y el Fosfuro de aluminio a
punto de prohibirse. Ninguno de los dos productos está registrado y por lo tanto
no están autorizado para su uso en ambientes urbanos Ud. tendría que conseguir que los encargados de la fumigación le dieran
información sobre la indicación precisa que tienen esos fumigantes en archivos.
No creo que puedan encontrar información confiable al respecto. Para indicar un
plaguicida hay que usar los criterios de eficacia, seguridad y adecuación. Creo
que este es un uso inadecuado, inapropiado y sin fundamentos. No obstante le
mando adjunta información sobre la toxicidad crónica y/o Fosfuro de aluminio, formador de fosfina Phostoxin Descripción del Producto Fumigante que elimina totalmente las plagas en
productos almacenados y para el control de roedores en campo abierto.
Indicaciones Phostoxin es indicado para fumigar productos a granel. Los
productos envasados, empaquetados, pueden ser tratados con Phostoxin cuando sus
envolturas son permeables a la fosfina, y son almacenados en locales debidamente
hermetizados o apilados bajo lonas plásticas impermeables al gas. Dosis y Forma
de Aplicación De aquí puede tomar sobre toxicidad crónica (en inglés) Chronic poisoning Y de aquí
también REPEATED EXPOSURE Bromuro de
metilo It is used widely as a fumigant for all types of dry foodstuffs, in grain elevators, mills, ships, warehouses, greenhouses and food-processing facilities. It is also used as a soil fumigant applied prior to planting either being
injected into the soil as a liquid or applied to the soil under sheeting in the
liquid form using evaporating jars and allowed to vaporize in situ (cold method)
or by heating (hot method). The methods permitted in various countries differ.
The type of plastic sheeting is also important The industrial uses of methyl bromide include: methylating agent in chemical
manufacture and as a low-boiling solvent e.g. for extracting oils from nuts,
seeds and flowers. Kidney and liver damage have also been reported (Ellenhorn and
Barceloux,1988). A fumigator chronically exposed to methyl bromide developed
paresthesia of the extremities, dysesthesias and visual impairment secondary to
optic atrophy (Chavez et al, 1985) Aquí existe un resumen en castellano muy
completo RESUMEN 1 Propiedades físicas y químicas y métodos analíticos El bromuro metílico es un gas incoloro a la temperatura ambiente y a la
presión atmosférica normal, con un punto de ebullición de 4 oC aproximadamente.
Es más pesado que el aire y se licua con facilidad por debajo de sus puntos
críticos. Es inodoro, excepto en concentraciones altas, en las que tiene un olor
parecido al cloroformo. No es inflamable en el aire, excepto en la gama de
concentraciones del 10-16%, pero arde en oxígeno. El bromuro metílico es
ligeramente soluble en agua, pero fácilmente soluble en otros El bromuro metílico se comercializa en forma de gas licuado. Las formulaciones par la fumigación del suelo contienen cloropicrina (2%) o acetato amílico (0,3%) como agentes de aviso. Otras formulaciones incluyen hasta el 70% de cloropicrina o de otros fumigantes o hidrocarburos como diluyentes inertes. Para la fumigación de mercancías se utiliza bromuro metílico al 100%. Se han descrito métodos analíticos para la determinación del bromuro metílico
en el aire, el agua, el suelo, los alimentos y los piensos. Entre los aparatos
para la determinación directa del bromuro metílico en el aire, en condiciones
prácticas, figuran los analizadores de gases por conductividad térmica, los
tubos de detección colorimétrica, los analizadores en infrarrojos y los
detectores por fotoionización. Se recomienda la cromatografía de gases Para la determinación por CG del bromuro metílico en el agua se utilizan técnicas de purga y captura, así como de muestreo en el espacio superior. Se recomienda la extracción con acetona y agua seguida de la cromatografía capilar de gas del espacio superior con DCE para la determinación ordinaria del bromuro metílico en los alimentos. Teniendo en cuenta que una parte del bromuro metílico se convierte en bromuro en el suelo, los alimentos y los productos biológicos, se examinan también los métodos de determinación del bromuro. Entre los utilizados para esa determinación en distintas matrices figuran métodos colorimétricos, la espectroscopia de rayos X, la potenciometría, el análisis por activación neutrónica, la cromatografía de gases y la cromatografía de líquidos de alto rendimiento. 2 Fuentes de exposición humana y ambiental El 77% aproximadamente del bromuro metílico fabricado se emplea para la fumigación del suelo, el 12% para la fumigación de cuarentena y de mercancías, el 5% para la fumigación de edificios y el 6% para obtener intermediarios químicos. El gas se emplea como fumigante del suelo en los campos o los invernaderos en la lucha contra las plagas. Se aplica en forma de líquido antes de la plantación, por inyección en el suelo o por evaporación en recipientes colocados bajo las cubiertas de plástico, dejando que el producto se evapore in situ (método frío) o por calentamiento (método caliente). Hay diferencias en los métodos utilizados en los distintos países. También es importante el tipo de cubierta de plástico empleada. Las dosis de bromuro metílico que se han de aplicar dependen de las normas
reglamentarias de los distintos países, el parásito vegetal que se ha de
eliminar (tipo, amplitud de la infestación), el cultivo siguiente, el tipo de
suelo y la cubierta de plástico empleada (tiempo En la fumigación espacial se emplea el bromuro metílico para el tratamiento
de productos agrícolas (por ej., alimentos, cereales, nueces, etc.) y la lucha
contra las termitas y los roedores. Se emplean concentraciones de 16-30 g de
bromuro metílico por m3 para la mayor parte de los productos almacenados en
naves y silos cerrados herméticamente y bajo cubiertas impermeables a los gases.
La fumigación debe ir seguida de un periodo de aireación. También es importante
la fumigación de hortalizas y frutas frescas en donde han Entre los usos industriales del bromuro metílico figuran la síntesis orgánica, habitualmente como agente metilante, y el empleo como disolvente de baja temperatura de ebullición, por ejemplo, para la extracción de aceites de nueces, semillas y flores. La utilización del bromuro metílico como refrigerante y como agente general de extinción de incendios sólo tiene ahora importancia histórica. 3 Transporte, distribución y transformación en el medio ambiente En el suelo, el bromuro metílico se hidroliza parcialmente para dar ion
bromuro. Después de la fumigación con bromuro metílico, el suelo puede ser
lixiviado con agua para evitar que los iones bromuro formados sean captados por
los vegetales plantados después en el suelo esterilizado. Este aumento de las
concentraciones de bromuro puede En el suelo, el bromuro metílico puede difundirse hasta una profundidad de 0,8 m, en función del tipo de suelo, la dosis, el método de aplicación y la duración de la fumigación; la mayor concentración de bromuro metílico se alcanza en la parte superior del suelo. El transporte del gas se produce por flujo de masas y difusión molecular, pero también influyen los procesos de desaparición que se produzcan simultáneamente, como la absorción y la disolución, y los procesos de desaparición irreversible, como la hidrólisis. La cantidad de bromuro metílico convertido en bromuro depende principalmente del contenido en materias orgánicas del suelo. El bromuro producido es principalmente hidrosoluble y puede ser captado por las plantas o desplazado a niveles inferiores del suelo por lixiviación con agua. En las plantas, la cantidad de bromuro acumulado depende de distintos
factores, como la concentración, el tiempo de exposición, la tasa de aireación,
las propiedades físicas y químicas del suelo, las tendencias climáticas
(temperatura y pluviosidad), las especies El bromuro metílico y sus productos de reacción, entre los cuales sólo se ha
considerado hasta ahora el bromuro, pueden entrar en la cadena alimentaria de
dos modos: consumo de alimentos cultivados en invernaderos o en campos fumigados
antes de la plantación o El bromuro metílico se degrada en el suelo por hidrólisis y descomposición microbiana. La constante de hidrólisis varía con la temperatura y el pH, y aumenta con la luz. El coeficiente de partición octanol/agua (log Pow) del bromuro metílico es de 1,19, lo que sugiere la existencia de una bioacumulación baja. El bromuro metílico que no se ha degradado en el curso de la fumigación pasa a la troposfera y por difusión ascendente a la estratosfera. No parece que haya un gradiente vertical importante del bromuro metílico en la troposfera, pero las concentraciones disminuyen con rapidez en la estratosfera baja por acción de la fotólisis. 4 Niveles ambientales y exposición humana La concentración de bromuro metílico en una muestra de agua del mar de superficie fue de 140 ng/litro. En muestras de agua costera cerca del mar del Norte, el valor medio de las concentraciones de ion bromuro fue de 18,4 mg/litro; la concentración de ion bromuro en los ríos de tierra adentro fue mucho más baja, excepto en las regiones donde se practicaba la fumigación con bromuro metílico o en las zonas de contaminación industrial. En el agua de drenaje de un invernadero de los Países Bajos se señalaron concentraciones de 9,3 mg de bromuro metílico/litro y de 72 mg de ion bromuro/litro. En el agua evacuada de un invernadero belga se registró un valor de 280 mg de bromuro/litro después de la fumigación. El contenido de bromuro natural del suelo depende del tipo de suelo, pero
suele ser inferior a 10 mg/kg. La presencia de restos de bromuro en el suelo
fumigado depende del tratamiento, la dosis, el tipo de suelo, la cantidad de
lluvia o de agua de lixiviación y la Las concentraciones de bromuro metílico o bromuro pueden ser altas en los alimentos que se han cultivado en suelos tratados previamente con bromuro metílico o que se han fumigado después de la recolección. En hortalizas frescas cultivadas en suelos previamente fumigados con bromuro metílico se han observado excepcional-mente concentraciones de bromuro que rebasaban el nivel autorizado de residuos. En algunos países no se permite cultivar hortalizas en los suelos tratados. El bromuro metílico se utiliza ampliamente para la fumigación de productos alimenticios después de la recolección, como trigo y cereales, especias, nueces, frutas frescas y desecadas, y tabaco. Las concentraciones de bromuro metílico suelen descender con rapidez después de la aireación y no se detectan residuos al cabo de unas semanas. Algunos alimentos, como las nueces, las semillas y productos grasos como el queso, tienden a retener el bromuro metílico y el bromuro inorgánico. Las personas pueden estar expuestas al fumigante y a restos de ion bromuro. También existe el riesgo de que haya bromuro metílico o un aumento del contenido de bromuro en el agua de pozos situados cerca de lugares en donde se ha fumigado bromuro metílico. Las personas que viven cerca de campos, invernaderos o almacenes fumigados con bromuro metílico pueden estar expuestos al gas. Los seres humanos pueden también correr peligro si accidental o deliberadamente penetran en locales que han sido fumigados para erradicar plagas antes de declararlos seguros. La exposición profesional al bromuro metílico es el riesgo más probable de
los operarios en el curso de la fabricación, el llenado y la fumigación. Dadas
las medidas de seguridad aplicadas estrictamente en las fábricas, sólo se
considera actualmente como grupo de alto riesgo a los fumigadores. Los
fumigadores que realizan el tratamiento de edificios pueden tener una exposición
muy superior al valor umbral límite (VUL) después de 24 horas de aireación
(80-2000 mg/m3). Sin embargo, los operarios convenientemente capacitados
utilizarán equipo protector apropiado. Los obreros que trabajan en el campo
durante la 5 Cinética y metabolismo Tras la absorción, el bromuro metílico o sus metabolitos se distribuyen con rapidez en numerosos tejidos, comprendidos los pulmones, las glándulas suprarrenales, los riñones, el hígado, los cornetes nasales, el cerebro, los testículos y el tejido adiposo. En un estudio de inhalación efectuado en ratas, la concentración tisular de bromuro metílico alcanzó el valor máximo una hora después de la exposición, pero descendió con rapidez, no encontrándose indicios 48 horas más tarde. Todavía no se ha esclarecido el metabolismo del bromuro metílico inhalado, pero parece que interviene el glutatión. Se ha observado la metilación de proteínas y lípidos en los tejidos de varias especies, incluidos los seres humanos, expuestos a través de la inhalación. También se han detectado aductos de ADN metilado después de la exposición in vivo e in vitro de roedores o células de roedores. En los estudios de inhalación con bromuro metílico marcado con [14C], la expiración de 14CO2 fue la principal vía de eliminación de 14C. Por la orina se eliminó una cantidad menor de 14C. Tras la administración oral de bromuro metílico, la excreción urinaria fue la principal vía de eliminación del 14C. El sistema nervioso central es un importante destinatario del bromuro metílico. En la neurotoxicidad provocada por el bromuro metílico pueden intervenir modificaciones del contenido de monoaminas y aminoácidos y tal vez de catecolaminas. 6 Efectos en los seres vivos del medio ambiente Se han realizado escasos estudios sobre los efectos del bromuro metílico en los seres acuáticos, pues el propio bromuro metílico sólo es ligeramente soluble en agua. Los valores de la CL50 van de un valor a las cuatro horas de 17 mg/litro para Cyprinus carpio L. A otro a las 48 horas de 1,2 mg/litro para Poecilia reticulata. En concentraciones letales, las lesiones de las agallas y el epitelio oral son la causa probable de la muerte. El ion bromuro se forma a partir del bromuro metílico después de la fumigación y se halla en el agua tras la lixiviación. Se observó una toxicidad aguda por iones bromuro en distintos seres de agua dulce en concentraciones comprendidas entre 44 y 5800 mg de Br-/litro; la concentración de efecto no observado (NOEC) en las pruebas de larga duración varió entre 7,8 y 25 mg de Br-/litro. Los iones bromuro produjeron una marcada alteración de la reproducción de crustáceos y peces. El bromuro metílico puede aplicarse directamente como fumigante a las semillas o los esquejes de las plantas o a los productos alimenticios después de la recolección para la desinfestación en el curso del transporte y el almacenamiento. Puede producirse el retraso de la germinación o la pérdida de la capacidad germinativa si la humedad o la temperatura son demasiado altas. Algunos cultivos, en particular las hortalizas de hoja, son sensibles a la fumigación con bromuro metílico debido a la presencia de bromuro en exceso en el suelo o indirectamente por los efectos en la microflora del suelo. El bromuro metílico tiene a veces un efecto positivo sobre las plantas, favoreciendo su crecimiento y el rendimiento de los cultivos. La fumigación con bromuro metílico erradica no sólo los seres vivos a los que se aplica sino también una parte de la flora del suelo, los gastrópodos, los arácnidos y los protozoos. El bromuro metílico se utiliza a menudo de preferencia a otros insecticidas por su capacidad para penetrar con rapidez y profundidad en productos no envasados y en los suelos. Las dosis de bromuro de metilo utilizado como fumigante en almacenes se sitúan sobre todo entre 16 y 100 g/m3 durante 2-3 días, dependiendo la dosis de la temperatura. Para matar los huevos y las pupas se necesita una dosis más alta que en el caso de los insectos adultos. Existen variaciones en la tolerancia de las distintas especies y fases de insectos y entre las distintas estirpes del mismo insecto. No existen datos sobre los efectos directos del bromuro metílico en las aves y los mamíferos silvestres. 7 Efectos en los animales de experimentación Los estudios de inhalación realizados en varias especies de mamíferos han
mostrado que existen claras diferencias relacionadas con la especie y el sexo en
lo que se refiere a la susceptibilidad al bromuro metílico. No se observó una
respuesta dosis-mortalidad muy Las manifestaciones neurológicas son los principales signos clínicos de toxicidad en las ratas y los ratones y, en concentraciones más altas, se ha observado también la irritación de las mucosas. Entre las manifestaciones neurológicas destacan los espasmos y la parálisis. Con dosis más altas varios autores han señalado modificaciones de la actividad locomotriz, disfunción de los medios periféricos, cambios del ritmo circadiano y aversión gustativa condicionada. Se han descrito lesiones histopatológicas en el cerebro, el riñón, la mucosa nasal, el corazón, las glándulas suprarrenales, el hígado y los testículos de ratas y ratones expuestos a distintas concentraciones de bromuro metílico. Las células de soporte olfativas y las sensoriales maduras sufren lesiones por la exposición a corto plazo al bromuro metílico, pero la reparación y la recuperación son rápidas. Los estudios de inhalación de larga duración (hasta 2 años) en ratas
mostraron lesiones de la mucosa nasal y el miocardio. En un estudio análogo de
larga duración en ratones se observaron los efectos tóxicos primarios en el
cerebro, el corazón y la mucosa nasal. En La administración oral de 50 mg de bromuro metílico/kg de peso corporal a ratas durante un periodo de hasta 25 semanas produjo inflamación e hiperplasia intensa del epitelio del antro cardial. Tras un periodo de recuperación postexposición, la principal lesión observada fue la fibrosis del antro cardial. En la rata tratada diariamente durante 25 semanas se observó un carcinoma inicial del antro cardial. Los ratones B6C3F y las ratas F344 expuestos a dosis de hasta 467 mg de bromuro metílico/m3 durante 13 semanas mostraron cambios ligeros de la morfología del esperma sin que se afectara la duración del ciclo estral. La exposición por inhalación a dosis de hasta 350 mg de bromuro metílico/m3 no produjo ningún efecto digno de mención sobre el crecimiento, los procesos reproductivos y las crías de dos generaciones consecutivas de ratas CD Sprague-Dawley. Los índices de fecundidad de machos y hembras se redujeron con dos niveles máximos de concentraciones en la camada F2B de la generación F1. En los estudios sobre la toxicología del desarrollo efectuados en conejos
blancos de Nueva Zelandia, la exposición a 311 mg de bromuro metílico/m3 (6
h/día; días 7-19 de la gestación) mostró una toxicidad materna moderada a
intensa. Los efectos en el desarrollo No se observaron efectos maternos, embrionarios o fetales adversos en conejos expuestos a 78 ó 156 mg de bromuro metílico/m3. En conejos blancos de Nueva Zelandia se indicó un nivel sin efectos observados (NOEL) de 156 mg de bromuro metílico/m3 en lo que respecta a la toxicidad materna y del desarrollo. Se ha observado que el bromuro metílico es mutagénico en varios sistemas de ensayo in vitro e in vivo. Provoca mutaciones letales recesivas ligadas al sexo en Drosophila melanogaster y mutaciones en células de mamífero cultivadas. No induce la síntesis no programada del ADN ni la transformación celular en células de mamífero cultivadas. En ratones a los que se administró bromuro metílico por distintas vías se observó la metilación del ADN en el hígado y el bazo. Se indujo la formación de micronúcleos en las células de la médula ósea y de la sangre periférica de ratones y ratas. Se desconoce el mecanismo de la toxicidad del bromuro metílico. 8 Efectos en la especie humana La exposición humana al bromuro metílico puede producirse por inhalación del gas o por contacto con el líquido. También se produce exposición por ingestión de agua de bebida contaminada con agua de lixiviación. Un estudio en la especie humana con testigos mostró que la captación del producto después de la exposición por inhalación es del 50% aproximadamente de la dosis administrada. El bromuro metílico es nocivo para el sistema nervioso, los pulmones, la mucosa nasal, los riñones, los ojos y la piel. Entre los efectos en el sistema nervioso central figuran la visión enturbiada, la confusión mental, la pérdida de sensibilidad, el temblor y los defectos del habla. La exposición tópica puede provocar irritación cutánea, quemaduras y lesiones oculares. La exposición a altas concentraciones de bromuro metílico causa edema pulmonar. La depresión del sistema nervioso central con parálisis respiratoria e insuficiencia respiratoria es a menudo la causa inmediata de la muerte, que va precedida de convulsiones y coma. Se han observado distintos signos y síntomas neuropsiquiátricos en el curso de las intoxicaciones agudas y prolongadas producidas por bromuro metílico. Las exposiciones de corta duración a dosis bajas de vapores han producido un síndrome de polineuropatía con manifestaciones centrales patentes. Entre las secuelas tardías figuran la bronconeumonía consecutiva a lesiones
pulmonares graves, la insuficiencia renal con anuria y la debilidad extrema, con
o sin signos de parálisis. Por lo general esos síntomas tienden a remitir
después de un periodo de unas semanas o meses. Sin embargo, se han observado
deficiencias sin recuperación, La exposición al bromuro metílico va acompañada de un aumento de la concentración de bromuro en la sangre. En los fumigadores se observa una relación entre el número de aplicaciones del gas y la concentración plasmática media de bromuro. |