Esta modalidad con figuras y símbolos de famosos personajes infantiles de la televisión, según lo establecido por las autoridades no está funcionando en la Villa de Céspedes ni tampoco en municipios cercanos pero, se ha detectado en ciudades como Bogotá y Medellín lo que no obsta para que las autoridades se encuentran tranquilas, de allí que hallan redoblado esfuerzos para informar a los estudiantes, docentes y padres de familia sobre este tipo de drogas que poco a poco las organizaciones dedicadas al microtráfico están implementando para lograr involucrar más jóvenes en este mundo.
Su distribución es exclusiva en algunos sectores de la ciudad por los altos costos; según el reporte de las autoridades una pastillas de éxtasis puede llegar a costar 50 mil pesos. En algunos mercados este tipo de drogas tiene diversas presentaciones o símbolos de acuerdo a ello varía su costo, por el alto grado de efecto que le produce al organismo. La Policía Nacional, a través del programa DARE, que es dirigido a estudiantes, docentes y padres de familia en las diferentes instituciones educativas, ha permitido que los jóvenes no caigan en la tentación de probar o distribuir este tipo de sustancias en sus colegios o barrios. Igual trabajo se realiza con la especialidad de Infancia y Adolescencia permitiendo un mejor y mayor acercamiento con las comunidades, fortaleciendo el binomio policía-comunidad y conjuntamente derrotar esos mitos de inseguridad como el tráfico de este tipo de sustancias sintéticas y otras expresiones delictivas.