Los investigadores analizaron datos recogidos de 450,000 personas en cien ciudades de EE. UU. entre 1982 y 2004. El equipo del Centro Médico Langone de la NYU, en la ciudad de Nueva York, halló que la exposición a las partículas minúsculas de las emisiones del combustible fósil se asocia con un aumento en el riesgo de enfermedad cardiaca. El combustible fósil incluye al carbón, el crudo y el gas natural.