La carabela portuguesa, la falsa medusa que mantiene en vilo a los bañistas en Telde. Su picadura puede paralizar.teldeactualidad.com. 31/01/17. Physalia physalis. Este es el nombre por el que la comunidad científica conoce a la carabela o fragata portuguesa. Una falsa medusa que en los últimos días ha irrumpido de forma masiva en la costa de Telde y en el litoral este de Gran Canaria. Pese a su aparente similitud con la medusa, se trata de un organismo gelatinoso y de tipo colonial, que cuenta con numerosos tentáculos provistos de cápsulas urticantes que liberan un veneno mucho más tóxico y que puede paralizar a un pez grande y afectar seriamente al ser humano con dolores muy intensos e incluso provocarle la muerte.Ver más noticias relacionadas en nuestro portal
Según relata al periódico digital Canarias en Hora Alejandro de Vera, conservador de Biología Marina del Museo de Ciencias Naturales de Tenerife, no se debe tocar a esta falsa medusa "bajo ningún concepto, aunque parezca que está muerta en la arena". "Hay niños que se la llevan en el bañador mojado, y la propia hidratación las devuelve a la vida”, explica este experto en la materia. Y es que tal y como apunta el biólogo marino, este organismo gelatinoso "es mortal en la medida que puede ser mortal la picadura de una abeja cuando se es alérgico a su veneno". En general provoca picaduras "más extensas" que las medusas, y aconseja que "salvo que se trate de un escozor o picor, si el bañista siente mareos o se siente mal se dirija inmediatamente a un centro hospitalario", pues en el ser humano, el veneno de la carabela portuguesa puede tener consecuencias "neurotóxicas, citotóxicas y cardiotóxicas". Entre los grupos de riesgo se encuentran los niños. La carabela portuguesa parece un juguete, su aspecto es bonito y brilla en mitad de la arena. Es normal que los pequeños se acerquen y la toquen. "Ahí está el peligro", advierte el conservador. "Aunque parezca que está muerta o seca, la hidratación las puede devolver a la vida y accionar su capacidad para atacar". Con aspecto de medusa, "la carabela es en realidad un organismo colonial cuyos individuos se especializan para mantener viva la colonia", describe el especialista. "Una agrupación de hidroides que se dividen el trabajo", señala. Desde "el neumatóforo, que es la parte de flota o vela, los gastrozoides encargados de la digestión, los dactilozoides que detectan, defiende y captura a las presas, hasta los gonozoides, que se ocupan de la reproducción". La buena noticia, destaca Canarias en Hora en una información que firma la periodista Ana Sharife, es que la carabela portuguesa "es más fácil de identificar que las medusas", ya que tiene "una especie de flotador que se ve a simple vista" y que además facilita también su retirada de las aguas. De Vera añade que la presencia de este organismo colonial suele ser más frecuente entre los meses de febrero y la primavera. Está formada por una vela gelatinosa que "le permite recorrer los océanos impulsada por los vientos, las mareas y las corrientes marinas", apunta, mientras que del cuerpo central cuelgan numerosos tentáculos que "le sirven para atrapar a sus presas" y que extendidos puede llegar a medir entre 10 y 50 metros.